:: ALTO MAIPO.
   ¿Sí o No?

Como Dedal de Oro informó en la edición pasada, desde hace unos meses se han realizado numerosas reuniones en diferentes lugares de nuestro Cajón en torno al proyecto hidroeléctrico Alto Maipo, con la participación de AES Gener -empresa responsable del proyecto- y vecinos de la zona. Algunas de estas reuniones, ya sea por iniciativa de AES Gener o por sectores de la comunidad cajonina, han sido complementarias a las oficiales, que son convocadas por CONAMA. Se ha discutido mucho, mucha agua ha corrido por los ríos de nuestro valle, pero no se ha llegado a una concordancia entre las partes.

Dedal de Oro ha preparado un informe sobre esta materia recurriendo a las partes implicadas: la empresa AES Gener y vecinos interesados en el tema, estos últimos, en general, leales guardianes del medio ambiente. No todas las personas a las que se les pidió su opinión respondieron a nuestro llamado, de modo que debemos lamentar la no participación, al menos en esta oportunidad, de quienes podrían haber aportado más antecedentes.

Los textos que entregamos a continuación están escritos en torno a un temario único presentado por esta revista, recomendando al mismo tiempo libertad de expresión. Creemos que el mejor modo de presentarlos es poner, primero, las opiniones de vecinos -que pueden entenderse como “demandas”- y luego la del representante de AES Gener, cuyo texto puede leerse como “respuesta” a esas demandas. En todo caso, dejamos en claro que cada participante hizo sus planteamientos sin conocer los de los otros participantes.

«El desarrollo del cajón del maipo no puede desprenderse de aquellos aspectos que le han dado identidad: su río y afluentes, su flora y fauna, y su gente»

Afirmamos que la construcción de un túnel profundo, con el fin de alterar el curso natural de las aguas, produciría efectos negativos irreparables, tales como: - la destrucción de los ecosistemas asociados a los cauces involucrados, con pérdida de especies protegidas, entre otros, sapo arriero, rana chilena y reptil gruñidor del volcán; - la pérdida de bofedales y humedales, protegidos por el decreto 78, que declara la zona como sitios prioritarios para la conservación de la biodiversidad; -el riesgo de desabastecimiento de agua potable
Protesta pacífica de vecinos en el Cajón del Maipo.
de Santiago; - y el riesgo de desestabilizar el sistema de riego de la zona al quedar las bocatomas sobre el nivel de agua.

Por otra parte, la realización del proyecto generaría “contaminación visual”, pues se pretende construir una subestación eléctrica en el sector del Manzano, líneas de transmisión eléctrica en sitios aún no definidos, bocatomas en altos ríos Volcán y Yeso, alrededor de seis centros de acopio de material estéril sacado de los 70 kilómetros de túneles, al menos cuatro campamentos para albergar a cerca de 4000 trabajadores y caminos para posibilitar estas nuevas obras. También afectaría el paisaje la disminución de aguas de los ríos. Aparecerían riberas secas y habría pérdida de vegetación asociada a menor agua y humedad. Parte del lecho de los afluentes del Maipo quedarían descubiertos, lo que acarrearía la pérdida de fuentes laborales asociadas al río: rafting, extracción de áridos, sitios de camping y ecoturismo en general. La consecuencia sería una pérdida de identidad para los habitantes del Cajón del Maipo al perderse el río como centro y eje de la vida y la cultura local, y también una pérdida de la esencia del paisaje para los turistas que buscan este lugar por sus aguas y flora asociada.

Sobre el aporte energético del proyecto, nuestras estimaciones concluyen que no cuenta con las aguas necesarias para generar los 531 mega que pretende. El proyecto pone en riesgo la sustentabilidad de la cuenca del río Maipo, por lo tanto, aun cuando resolviera parcialmente la demanda energética, crearía un problema asociado al impacto ambiental y arriesgaría la provisión de aguas al gran Santiago, según consta en documento de Aguas Andinas. Los problemas sociales del Cajón del Maipo tampoco quedarían resueltos, ya que AES GENER ofrece trabajo ocultando a la comunidad que ellos no ejecutan las obras, sino empresas subcontratadas que no tienen ninguna obligación contractual de preferir trabajadores de la zona.

La demanda energética del país se duplica cada diez años, por lo que ningún proyecto hidroeléctrico ofrece una solución relevante al tema energético, que es evidentemente un tema más de fondo que tiene que ver con la política energética y ambiental de nuestro país y el actual modelo de desarrollo, que no ve la sustentabilidad a largo plazo.

El desarrollo del Cajón del Maipo no puede desprenderse de aquellos aspectos que le han dado identidad: su río y afluentes, su flora y fauna, y su gente. El proyecto Alto Maipo de AES GENER Corporation minimiza o desconoce los efectos medio ambientales y simplemente no considera el impacto social y humano al ni siquiera identificar todas las actividades productivas y sociales que se verían afectadas con la realización del proyecto. Para detener no sólo este proyecto, sino cualquier otro que afecte negativamente el Cajón del Maipo, es necesario informar a la comunidad, que, organizada y logrando paulatinamente conciencia de su poder ciudadano, podrá contrarrestar el poder económico y comunicacional que detenta la empresa.

Carolina Besa, Profesora del Colegio Andino Antuquelén, y
Lorella Lapresti, Directora y Fundadora del Colegio Andino Antuquelén,
vecinas del Cajón del Maipo y coordinadoras ciudadanas No Alto Maipo.

 


«...si este proyecto llegara a construirse, veríamos cuencas secas, se perdería la flora y fauna en vastos sectores del cajón y sería esperable un impacto macro en toda el área intervenida»

Para comprender el impacto del Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo que la empresa Gener pretende realizar en la zona del Cajón del Maipo, es importante visualizar la enorme magnitud del movimiento de aguas que eso implica. El proyecto impacta varias cuencas.

Las primeras captaciones serían el Alto Maipo, tomando agua de cuatro esteros (La Engorda, Las Placas, Colina y Morado) que son los afluentes más importantes del Río Volcán. Se pretende captar un caudal máximo de 12.000 litros por segundo, que sería trasvasijado desde la cuenca del Río Volcán a la del Río Yeso a través de un primer túnel. Así, se le
Protesta pacífica de vecinos cajoninos en el Centro de Santiago.
“saca” a la cuenca del Río Volcán un estimado de un 50% de sus recursos hídricos totales. La segunda captación proyectada es en la cuenca del Río Yeso, en la que el caudal máximo captado es de 15.000 litros por segundo (prácticamente el 100% de los recursos de esa cuenca), los que, sumados al caudal de los esteros indicados, da 27.000 litros por segundo, total que sería trasvasijado a la cuenca del Río Colorado por un segundo túnel. La tercera captación proyectada es en el Río Colorado, desde donde se proyecta captar un máximo de 46.000 litros por segundo (más o menos el 90% de los recursos de esa cuenca), los cuales, sumados a los 27.000 litros anteriores, serían trasvasijados a través de un túnel gigantesco a la cuenca del Río Maipo en el sector de Las Lajas.

Entendida la magnitud del Proyecto, la pregunta obvia es: ¿Cuáles son las consecuencias esperadas de esta intervención? En lo que respecta a derechos de agua consuntivos, canales de regadío y otros, éstos no se verían afectados. No obstante, la zona en general y la flora y la fauna de cada cuenca serían seriamente afectadas. Para graficar este impacto es importante el concepto de “caudal ecológico”. La Ley de Bases del Medio Ambiente Nº19.300 establece como tal el caudal mínimo que debieran tener los ríos (y esteros) para mantener los ecosistemas presentes, preservando la calidad ecológica y el respeto de derechos de terceros. El Proyecto no realiza estudios de Línea Base y establece “caudales ecológicos” miserables: Estero La Engorda: 200 l/s; Estero Colina: 300 l/s; Estero Las Placas: 140 l/s; Estero El Morado: 240 l/s; Río Yeso: 1 m3/s; y Río Colorado: 3,12 m3/s. Peor aún es que no se establezcan los mecanismos de control y seguimiento en una posible etapa operativa.

En resumen, si este Proyecto se llegara a construir, veríamos cuencas secas (semejantes al Río Maipo en La Obra), se perdería la flora y fauna en vastos sectores del Cajón y sería esperable un impacto macro en toda el área intervenida. Todas las cuencas intervenidas son afluentes del Río Maipo, por lo que éste también se vería seriamente afectado. Por ejemplo, en el sector desde San Gabriel hasta la desembocadura del Río Colorado es esperable una disminución de un 30% del caudal en determinadas épocas del año. Hacia el sector de El Manzano el caudal disminuiría hasta un 50%. Al respecto, debemos recordar que existe un marco jurídico que protege toda la zona del Cajón del Maipo en base al Decreto Supremo DTO-78 y a la Resolución Exenta Nº184 de la COREMA RMS, los que establecen el Cajón del Maipo como un sitio prioritario para la conservación de la bio-diversidad. Como integrantes del grupo de amigos que formamos el Santuario Río Colorado, haremos todo lo posible por denunciar la ilegalidad de este proyecto y recurriremos a todas las instancias judiciales, contraloría y políticas para evitar su construcción.

Es de hacer notar que Gener en su Estudio de Impacto Ambiental y en las presentaciones a la comunidad, ha omitido información. El Proyecto ha sido presentado estableciendo potencias de generación que no son verdaderas. Por ejemplo, han intentado mostrar que la capacidad de generación es de 530 Mega Watts Hora, lo que sólo corresponde a un peak de 2 a 3 meses al año. El promedio real anual sería de 200 Mega y menos. En consecuencia, se ha manipulado la información induciendo a engaño. Hemos solicitado a una prestigiada oficina consultora de ingeniería la elaboración de un estudio para establecer con rigurosidad los recursos disponibles, el que será entregado a las autoridades políticas y administrativas para fundamentar científicamente que el Proyecto de Gener tiene un impacto ambiental enorme y no se ajusta a lo que ellos mismos especifican.

Hace unos meses los integrantes del Santuario Río Colorado hemos comprado un campo de 4.000 hectáreas en el sector Las Monjas, El Manzano, con una ribera al Río Colorado de más o menos un kilómetro y medio, río que sería secado por el Proyecto de Gener. Nuestro propósito es establecer un Santuario con el fin de preservar y restaurar el lugar y desarrollar un proyecto de turismo sustentable con el medio ambiente que contaría con un centro de salud (integrando a todas las áreas de la comunidad local), restaurant naturista, camping, agricultura orgánica, forestación y restauración de suelos con especies nativas, centro de educación para la conservación del medio ambiente, utilización de energías renovables (no nos enchufaremos a la red eléctrica), tratamiento de basuras y residuos, etc., todo realizado con mano de obra local.

Jack Stern
Msc. Suelos y Agua

 


«No hay ninguna posibilidad que el proyecto afecte el clima o ponga en peligro la flora o la fauna” “tenemos la más plena convicción en cuanto a la compatibilidad del proyecto con el turismo»

Las aguas necesarias para nuestro proyecto no se «extraen», como algunos dicen, y tampoco «se consumen». Sólo se captan —para ser respetuoso con Juan Pablo Orrego usaremos el futuro potencial hasta que el proyecto sea aprobado— se captarían para aprovechar su capacidad de generación de electricidad y luego se devolverían, kilómetros abajo, a su cauce natural. Y hablamos de sólo una parte del caudal de algunos de los afluentes del río Maipo. Las fuentes de riego que son derechos adquiridos de personas o instituciones no se pueden vulnerar. La empresa los respeta: está obligada a hacerlo, por lo demás. Están protegidos por ley, como la propiedad privada u otros derechos. Así como AES Gener tiene derechos de agua constituidos, otras personas que también los tienen pueden estar absolutamente
Fachada de la Central Alfalfal, de AES Gener, con uno de los grupos de la comunidad El Manzano, durante una visita.
tranquilas. Cualquier vulneración que el proyecto pudiese causar —por ejemplo, que bocatomas de riego quedasen «colgadas» por disminución parcial decaudal provocada por el proyecto— sería subsanada por la empresa mediante algún sistema que permita captar las aguas que se captan sin proyecto. Por otra parte, las intervenciones en los cauces y su disminución son a una escala muy menor a aquella que se requeriría para causar un cambio climático. El caudal del río Maipo, entre la confluencia con el río Volcán y la confluencia con el río Colorado, bajaría en promedio 11% y la disminución de caudal en invierno sería aún menor. No hay ninguna posibilidad que el proyecto afecte el clima o ponga en peligro la flora o la fauna local.

Sólo durante el período de construcción el proyecto implicaría algunas molestias, pero ellas serían muy acotadas. La empresa tomará las medidas necesarias para aminorarlas al máximo. Las construcciones más significativas son los campamentos e instalaciones de faenas, que estarían ubicados en la cordillera, lejos de los centros turísticos y de los tránsitos más frecuentados. Éstas se desmantelarían y retirarían una vez concluidas las obras. Las casas de máquinas serían subterráneas y las subestaciones estarían lejos del tránsito turístico. Tenemos la más plena convicción en cuanto a la compatibilidad del proyecto con el turismo. Más allá de la demostración que la empresa espera dar con información técnica en esta fase de evaluación ambiental, la misma comunidad podrá comprobarlo dentro de unos años. En el río Maipo continuará efectuándose rafting, las actividades turísticas seguirán su desarrollo, e incluso nosotros contribuiremos a ello mediante diversas iniciativas de apoyo local. La mayor reducción que podría sufrir el Maipo, en el peor año seco, a la altura de San Alfonso, que es donde se inicia el rafting, es del 14%. No vemos cómo podría afectar al turismo.

El proyecto está diseñado con márgenes de seguridad amplia, de modo de incorporar al Sistema Interconectado Central (que va de Taltal a Chiloé) un promedio de 2.500 Gwh al año, utilizando la capacidad instalada de 531MW que aportarían sus dos centrales. Los cálculos que opositores al proyecto han esgrimido en algunas presentaciones confunden erróneamente la capacidad máxima con la producción en estado de régimen. Alto Maipo aportaría una energía eléctrica equivalente al 35% del consumo actual de los hogares de todo el Sistema Interconectado Central. No es poco, ¿no?

Es importante señalar la actitud abierta, temprana y transparente que ha tenido AES Gener con la comunidad, adelantándose voluntariamente a informarla y escucharla, especialmente a aquellos que podían haberse sentido más afectados. Me ha tocado trabajar en varios proyectos emblemáticos donde la participación ciudadana ha sido un elemento clave para lograr consensos de viabilidad. Como Ingeniero Civil Industrial y Comunicador Multimedia, creo que las actuales tecnologías de visualización permiten, tanto a los proyectistas como a quienes tienen el deber de evaluar los proyectos y a las comunidades, tener una percepción más palpable y precisa de cómo sería el proyecto una vez puesto en práctica. Y de esta manera despejar dudas y derribar muchos mitos que se tejen en torno a los proyectos. Y también visualizar posibles conflictos y mejorarlos. Este ha sido también el caso en Alto Maipo. Todas las observaciones y preocupaciones recogidos de las comunidades han sido escuchados por la dirección del proyecto y se estudia la forma como acoger aquellas legítimas reclamaciones. Por ello encuentro importante referirme al equipo técnico que está tras el diseño de Alto Maipo -que me parece una obra de ingeniería genial- y que da garantía de su buena conclusión: Carlos Mathiesen, su gerente, Felipe Naranjo y Luis Ibáñez, ingenieros, quienes tienen la experiencia de haber trabajado en líneas de Metro subterráneas; y Patricia Alvarado, su jefa de ingeniería. Todos ellos fueron parte del equipo que construyó Alfalfal. Son más de 20 años de experiencia y reflexión en cómo producir energía de la manera más limpia y efectiva, cuidando el medio ambiente. Ha sido también muy valioso trabajar con Carlos Enberg, antiguo funcionario de Gener, quien es un «hombre bueno», hoy dedicado a la educación en sectores populares, y quien tiene la doble perspectiva de empresa y comunidad. Este es un buen proyecto, necesario y respetuoso.

Niccolo Martelli,
Ingeniero, representante de AES Gener.